Contratar al administrador adecuado es esencial para cualquier comunidad, ya que a menudo puede determinar su funcionamiento diario. Un administrador que evite problemas, genere confianza y ahorre dinero es un gran activo para cualquier comunidad. Pero, ¿y si tu administrador actual no está a la altura? Aquí tienes 10 situaciones en las que deberías plantearte contratar a un nuevo administrador.
El administrador es el principal punto de contacto para todos los miembros de la comunidad. Debe estar siempre disponible para escuchar sus necesidades, responder a sus preguntas y proporcionar información sobre la comunidad y sus servicios. Una mala comunicación entre el administrador y los miembros puede crear confusión e incluso enfado entre los miembros de la comunidad, lo que podría dar lugar a una menor satisfacción de los residentes.
Probablemente hayas oído historias de terror sobre administradores poco profesionales o groseros con los miembros. Es esencial que tu administrador sea capaz de manejar las crisis y mantener un nivel de profesionalidad con todos los miembros de la comunidad. Esto ayuda a garantizar que los problemas puedan resolverse de forma oportuna y eficaz.
Los administradores se encargan de respetar las normas y reglamentos de la comunidad. Si el administrador no las cumple, podría crear confusión entre los miembros y causar trastornos en la comunidad. Incluso podría dar lugar a acciones legales contra la comunidad.
¿Tu administrador promete algo pero nunca lo cumple? Ya sea un proyecto o un servicio prometido, incumplir las promesas puede causar una pérdida de confianza en el administrador e incluso tensar las relaciones entre éste y los miembros de la comunidad.
Un administrador debe conocer toda la normativa legal que se aplica a la comunidad, como los códigos de construcción y seguridad. De lo contrario, no podrá informar adecuadamente a los miembros de la comunidad de sus derechos y responsabilidades, lo que podría dar lugar a problemas legales.
La gestión financiera es una función vital del administrador de una comunidad. Una mala gestión financiera puede acarrear problemas como presupuestos mal gestionados, retrasos en los pagos y gastos innecesarios. Una gestión financiera sólida garantiza que la comunidad esté siempre financieramente saneada.
Un administrador de comunidad debe asegurarse siempre de que las quejas se atienden y se resuelven a tiempo. Si las quejas no se atienden o no se resuelven adecuadamente, puede dar lugar a miembros descontentos e incluso puede disuadir a posibles nuevos miembros.
Un administrador debe conocer bien los servicios y reglamentos de la comunidad. Si carece de estos conocimientos, es posible que no pueda abordar adecuadamente los problemas o las solicitudes. La falta de conocimientos también puede impedir que un administrador comprenda y responda a los requisitos legales.
En un mundo en el que la tecnología es clave, un administrador debe ser capaz de utilizar eficazmente las últimas herramientas y programas. Esto garantiza que la comunidad funcione sin problemas y con eficacia.
El trabajo del administrador es comprender las necesidades de los miembros y asegurarse de que se satisfacen. Si el administrador no comprende las necesidades de los miembros, podría provocar un estancamiento de la comunidad e incluso disensiones entre los miembros.
Cuando llegue el momento de cambiar al administrador de tu comunidad, la decisión no debe tomarse a la ligera. Ten en cuenta los 10 aspectos anteriores para asegurarte de que tomas la decisión correcta para tu comunidad. Con el administrador adecuado, tu comunidad puede convertirse en un lugar seguro y próspero al que llamar hogar.