¿Qué es y cómo se gestiona una propiedad horizontal?
Tanto si eres un nuevo propietario o estás pensando en vender tu piso o casa en Barcelona, estar al corriente de tus obligaciones y derechos como miembro de una propiedad horizontal, además de sus órganos de gestión y administración, es primordial.
La gestión de las propiedades horizontales se hacen cargo del control, la planificación y la organización de actividades relacionadas con la existencia y uso de un bien inmobiliario. En la mayoría de los casos estos viene inmuebles tienen copropietarios, lo que conlleva a que haya un entendimiento i consenso entre las partes para poder efectuar cualquier cambio o acción.
Des de el departamento de administración de comunidades de Inmotarget, queremos explicaros en que consisten este tipo de propiedades y como se realiza su gestión.
¿En qué consiste una Propiedad horizontal?
Las propiedades horizontales son figuras jurídicas que permiten gestionar conjuntos privados de construcciones en un entorno comunitario. Estas construcciones, su infraestructura y zonas comunes, es compartida por las personas que conforman la propiedad privada.
Las propiedades horizontales están reguladas por la Ley de propiedad horizontal. Esta dictamina unas normas de convivencia, además de la división sobre las propiedades y zonas comunes.
Hay distintos tipos de propiedades horizontales:
- Conjuntos de uso residencial
- Edificio o conjunto de uso comercial
- Edificios mixtos
¿En qué se distingue de una propiedad vertical?
Básicamente, una propiedad vertical se compone tanto de locales, viviendas (pisos, casa, etc.) o garajes que pertenecen a una única propiedad. Por este motivo, estos no constituyen una comunidad de propietarios y no deben abonar cuotas de participación.
¿En que consiste la gestión de una propiedad horizontal? ¿Quién la lleva a cabo?
Tal y como hemos comentado anteriormente, la gestión de una propiedad horizontal se encarga de planificar, organizar, dirigir y ejecutar las actividades, acciones, reformas, etc., relacionadas con el uso de un bien inmobiliario con copropietarios.
Cada vivienda, oficina, local o parte del inmueble tienen asignados una cuota de participación que determina la cantidad a pagar para hacer frente a gastos comunitarios. Estos gastos pueden ser de electricidad, seguros, mantenimiento, reformas, etc.
Esta cuota también determina el porcentaje que tiene cada vecino sobre el 100% de los votos en Junta de propietarios.
Para llevar a cabo estas acciones se necesitan unos conocimientos relacionados con la dirección de recursos humanos, logísticos y administrativos para poder satisfacer las demandas de la comunidad y sus propietarios. Por estas razones, siempre recomendamos que se derive la responsabilidad de la gestión de la propiedad horizontal a un administrador de comunidades colegiado y experto.
Estas son sus funciones principales, entre muchas otras:
- Tener conocimiento total de las normativas vigentes y asegurarse que se cumplen, además de estar al corriente de todos los lineamentos que han establecido los órganos reguladores de la propiedad horizontal.
- Hacer un correcto uso de todos los recursos de la propiedad horizontal.
- Planear, preparar las reuniones y asambleas, además de preparar los informes de gestión.
- Hacerse cargo de los cobros de las cuotas.
- Crear presupuestos de gastos e ingresos.
- Evaluar riesgos en la propiedad horizontal y preparar acorde con las herramientas necesarias.
- Manejar la propiedad y contratar los servicios requeridos para su mantenimiento, control, etc.
En esta gestión, los administradores de comunidades pueden hacer uso de herramientas digitales o seguir la gestión tradicionalmente, es decir, haciendo todo a mano.
Esta última, no obstante, ha sido muy reemplazada en los últimos tiempos gracias a la aparición de múltiples softwares y la posibilidad de crear aplicaciones online de acceso privado para los miembros de la comunidad.
Si tiene cualquier duda sobre la administración de su comunidad o necesita asesoramiento, no dude en ponerse en contacto con nosotros.